Extracto del libro CRÓNICA DE UN CAMBALACHE de Alicia Bandini
(IMPREX Ediciones - 2022)
Alicia Bandini, argentina ubicada en Buenos Aires, es una historiadora e investigadora, especialmente en el campo del tango.
El subtítulo de su libro, "La década infame en clave discepoliana", anuncia su propósito - cómo influyeron las miserias de los '30 en la obra del gran poeta Enrique Santos Discépolo - y explica su título , "Crónica de un cambalache", un guiñ al muy famoso tango "Cambalache".
Aquí he elegido su presentación de "Alma de bandoneón" para dar una idea de esta obra. Para una percepción completa de la poesía, sugiero la escucha de la interpretación del cantor
"En 1935 estrena el tango “Alma de bandoneón” donde una vez más aborda el tema de la frustración, el desencanto y la soledad. En sus versos ese fueye se humaniza, su sonido es la queja del hombre incomprendido, y en su sufrimiento se retuerce como un cuerpo enfermo que abre su pecho para gritar su llanto visceral y luego se encoje, apretado en silencio.
“El bandoneón llora porque es una oruga que quiso ser mariposa, que quiso volar y llenarse de cielo, pero que ahora gime su ilusión en la derrota de la tierra.” (Galasso - Discépolo y su época)
El personaje del tango se identifica con el bandoneón y le confiesa su frustración:
Igual que vos soñé
igual que vos viví
sin alcanzar mi ambición.
“Una pesada atmósfera de fracaso domina a los distintos sectores sociales en 1934. Cerrados todos los horizontes, la clase obrera se entrega al escepticismo político. […] ¿Y cuál es, mientras tanto la actitud de la inteligencia en este país de hombres frustrados? Borges, el gran literato, escribe la ´Historia universal de la infamia´, al tiempo que Discépolo, el modesto poeta de la calle, registra en sus tangos la historia de la infamia nacional.”. (Galasso - Discépolo y su época)"
Este mismo personaje se da cuenta que él también es víctima del escepticismo de la época y le confía:
Yo me burlé de vos
Porque no te entendí
Ni comprendí tu dolor
Tuve la sensación
De que tú canto cruel
Lo habías robado, bandoneón…
Para luego, arrepentido revelarle:
Recién comprendo bien
la desesperación que te revuelve al gemir
¡Sos una oruga que quiso
Ser mariposa antes de morir!
Comprende que el bandoneón grita su fracaso de dolor con una:
Voz que es fondo
De la vida oscura
Y sin perdón
Del que soñó volar
Y arrastra su ilusión
Llorándola…
Entonces le confiesa él también su propia frustración y desencanto, sabiendo que al final lo buscará para morir abrazados en soledad:
Alma de bandoneón
–alma que arrastro en mí-
Voz de desdicha y de amor
Te buscaré al morir
te llamaré en mi adiós
Para pedirte perdón
Y al apretarte en mis brazos
Darte en pedazos mi corazón."
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